Veo que con inusitado entusiasmo se está llevando a cabo una campaña denominada Chau Fueros patrocinada por algunos legisladores y políticos en campaña y me hace recordar cuando en el 2001 se hablaba del que se vayan todos ¿Lo recuerdan? Déjenme decirles que estoy en contra de dicha iniciativa y porque. Los fueros parlamentarios son un instituto del derecho que tienen los legisladores para investigar irregularidades y actos de corrupciones llevados a cabo por sus pares, por funcionarios de los poderes ejecutivos y judicial o cualquier otro ciudadano, sirven para proteger al investigador de carpetazos y abusos de poder por parte del acusado, sin ellos, los legisladores, no podrían llevar a cabo sus investigaciones con entera libertad y despreocupados de acciones inescrupulosas y abusos de poder por parte de los acusados.
En verdad, entiendo a todos aquellos que comulgan con esta propuesta, asqueados por la podredumbre enquistada en al accionar de los poderes del estado, pero también entiendo que pagan justos por pecadores, son muchos más nuestros representantes honestos que los corruptos y si no pensará así no creería en nuestra democracia. Las soluciones son otras, sanear la justicia, investigar a fondo con la protección de los fueros y encarcelar a todos los que toman el estado (funcionarios y amigos) como un feudo propio y hacen de ello motivo de sus riquezas.
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